Hola, holilla, amiwi, hoy vengo a hablarte de Canto al amor, mi última novela, una novela corta de género romántico e histórico. Pero ¿de qué va?
Canto al amor parte de unos versos del romancero viejo que dicen así:
Del caballero leal zamorano y de Vellido Dolfos, que se salió de Zamora para con falsedad hacerse vasallo del rey don Sancho
Sobre el muro de Zamora
vide un caballero erguido;
al real de los castellanos
decía con grande grito:
—¡Guarte, guarte, rey don Sancho,
no digas que no te aviso,
que del cerco de Zamora
un traidor había salido:
Vellido Dolfos se llama,
hijo de Dolfos Vellido;
si gran traidor fue su padre,
mayor traidor es el hijo;
cuatro traiciones ha hecho,
y con ésta serán cinco!
Si te engaña, rey don Sancho,
no digas que no te aviso.
Gritos dan en el real:
¡A don Sancho han mal herido!
¡Muerto le ha Vellido Dolfos;
gran traición ha cometido!
Desque le tuviera muerto
metióse por un postigo;
por las calles de Zamora
va dando voces y gritos:
—¡Tiempo era, doña Urraca,
de cumplir lo prometido!
Trato en la novela de desvelar qué hay tras estos versos y, como has supuesto, el protagonista de la historia es Vellido Dolfos, un noble leonés que durante siglos fue tachado de traidor por la historia y la leyenda castellana. Pero pongámonos en contexto. Corre el año 1072 y Sancho I de Castilla, en un movimiento digno de Juego de tronos, y con la ayudita del Cid, ha hecho preso a su hermano Alfonso, tras romper con él un acuerdo de paz y haberlo usado para destronar al hermano de ambos, García, y quedarse con su reino. Así que Sancho se ha coronado rey de León, a pesar de la oposición de la nobleza y el clero; tiene en su poder el reino que su padre dividió entre todos los hermanos al morir, bueno, todos no, Zamora, ciudad en la que su hermana Urraca es la que gobierna se le resiste cual pequeña aldea gala a los romanos. La señora del patronazgo zamorano le ha dicho al nuevo rey lo que Gandalf al Balrog: no, mi cielo, aquí no puedes pasar. Así que Sancho I de Castilla y II de León se coge a sus soldados y se va a Zamora a conquistarla. Pero por algo la llaman la bien cercada y se tiene que conformar con montar guardia durante siete meses para tratar de rendirla por el hambre.
Y es aquí, al inicio de ese cerco, que comienza la historia de Canto al amor. Vellido Dolfos, noble leonés, y a decir de los rumores de la época, amante de doña Urraca, será el que tome la decisión de desafiar al rey don Sancho y sus tropas comportándose según algunos con falsedad, según los menos, como un valiente. En Canto al amor trato de descifrar qué motivos le empujan a actuar como lo hizo, una decisión que le valió un negro nombre en la historia. Y sí, me tomo alguna que otra licencia poética, empero, he tratado de escribir manteniendo todo el rigor posible y la historia ha sido supervisada por un historiador especializado en historia medieval.
Pero como digo en la sinopsis comercial del libro, ésta no es sólo una novela con la que viajar al pasado, sino también la historia de un amor que quemaba. Una novela corta en la que se mezcla leyenda e historia, envuelta en una bruma de sensualidad que pretende ser un ensalzamiento al amor, al que no se ve y al concupiscente. Y también, por qué no, un canto a la vida.
María de Xacobe 